• Enfermedad Diverticular (Divertículos)

Si en una colonoscopia de rutina te dijeron “tiene divertículos” o si has buscado “dolor en el lado izquierdo del abdomen”, esta sección es para ti.

P1: ¿Qué son los “divertículos”? ¿Es lo mismo que diverticulitis?

Respuesta: No es lo mismo, ¡y esta es la clave!

• Diverticulosis: Es simplemente tener “divertículos”, que son pequeñas “bolsitas” o “sacos” que se forman en la pared del colon (intestino grueso). Son muy comunes (más del 50% de los mayores de 60 años los tienen) y usualmente se deben a años de estreñimiento. Tenerlos (diverticulosis) no es una enfermedad y no da síntomas.

• Diverticulitis: Esta SÍ es la enfermedad. “itis” = inflamación. Es cuando una de esas “bolsitas” se tapa con materia fecal, se inflama y se infecta.

P2: ¿Cuáles son los síntomas de una “diverticulitis”?

Respuesta: Piénsalo como una “apendicitis, pero del lado izquierdo”.

• El síntoma principal es un dolor constante en la parte baja del abdomen, casi siempre del lado izquierdo.

• Se acompaña de fiebre (a veces solo febrícula).

• Puede haber náusea, vómito o cambios en la evacuación (diarrea o estreñimiento). Una diverticulitis requiere tratamiento inmediato con antibióticos y, a veces, hospitalización para evitar complicaciones graves (como un absceso o una perforación).
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• Trastornos Motores del Esófago (Dificultad para tragar)

Si se te atora la comida o no puedes pasar los alimentos o  simplemente hay dolor de pecho al comer, puedes tener un trastorno en la motilidad gastrointestinal.

P1: ¿Por qué siento que la comida se me “atora” en el pecho?

Respuesta: Esto se llama “disfagia” y nunca es normal. Puede ser por dos causas:

1. Una obstrucción física (como un tumor o una inflamación por reflujo severo).

2. Un Trastorno Motor: El esófago (el tubo que conecta tu garganta con tu estómago) deja de “empujar” la comida correctamente.

P2: ¿Cómo que el esófago “deja de empujar”?

Respuesta: El esófago se mueve con ondas musculares coordinadas (como una oruga) para bajar la comida. A veces, estas ondas son débiles, desorganizadas, o (en una enfermedad llamada Acalasia) la “puerta” (válvula) de abajo, que conecta con el estómago, se “atora” y no se relaja para dejar pasar la comida.

P3: ¿Cómo se estudia esto? ¿Se puede tratar?

Respuesta: Aquí es donde la endoscopia no es suficiente. El diagnóstico requiere dos pasos:

1. Endoscopia: Para descartar que haya una obstrucción física (un tumor o una estenosis).

2. Manometría Esofágica de Alta Resolución: Este es el estándar de oro. Es un estudio avanzado (una sonda delgada que pasa por la nariz) que mide las presiones y la coordinación de tu esófago. Nos da el mapa exacto de cómo se mueve. El tratamiento dependerá del diagnóstico (si es Acalasia, espasmo esofágico, etc.), pero tenemos soluciones que van desde medicamentos hasta procedimientos endoscópicos avanzados (como el POEM o dilataciones) para que puedas volver a comer normal.

• Pancreatitis Crónica

Esta es una condición compleja y difícil. Si tienes un dolor crónico que no se quita, dolor de espalda y en el abdomen después de comer, sufres de diarrea con grasa o tienes antecedentes de pancreatitis aguda, tu páncreas puede permanecer inflamado de forma crónica.

P1: ¿Qué es la Pancreatitis Crónica? ¿Es lo mismo que la aguda?

Respuesta: Son muy diferentes. La pancreatitis aguda (Sección 2) es una inflamación súbita que, en la mayoría de los casos, se cura y el páncreas se recupera. La pancreatitis crónica es un daño permanente e irreversible. Es un proceso lento donde el páncreas se va inflamando, cicatrizando, endureciendo y “apagando” poco a poco. Es un daño que ya no se puede regresar.

P2: ¿Por qué da la pancreatitis crónica? ¿Es solo por alcohol?

Respuesta: El consumo de alcohol crónico y en exceso (por muchos años) es la causa número uno, sin duda. Pero también puede ocurrir por otras razones:

• Tener muchos episodios de pancreatitis aguda (pancreatitis recurrente) que van dejando cicatrices.

• Causas genéticas (hereditarias).

• Obstrucciones del conducto del páncreas.

• En muchos casos, a pesar de buscar, no encontramos la causa (se llama idiopática).

P3: ¿Cuáles son los síntomas? ¿Solo duele?

Respuesta: El síntoma principal es el dolor crónico. A diferencia de la pancreatitis aguda (que es 10/10), este es un dolor sordo, constante, en la boca del estómago, que se va a la espalda como “cinturón” y que empeora después de comer. Pero lo más importante son los síntomas de que el páncreas “ya no funciona” (Insuficiencia Pancreática):

1. Mala Digestión (Insuficiencia Exocrina): El páncreas deja de hacer enzimas para digerir la grasa. Esto causa diarrea crónica, evacuaciones muy olorosas, que flotan y se ven grasosas o aceitosas (esteatorrea). Como no absorbes nutrientes, pierdes mucho peso.

2. Diabetes (Insuficiencia Endocrina): El páncreas dañado deja de producir insulina, y el paciente se vuelve diabético (una diabetes tipo 3c, que es frágil y difícil de controlar).

P4: ¿Qué tan grave es? ¿Tiene cura?

Respuesta: No tiene “cura” en el sentido de revertir el daño; la cicatrización es permanente. Es una condición muy seria porque pierdes la función de un órgano vital. El dolor puede ser incapacitante, la desnutrición es severa y un páncreas crónicamente inflamado y calcificado tiene un riesgo aumentado de desarrollar cáncer de páncreas. Por eso requiere un seguimiento muy estricto.

P5: ¿Cómo se maneja o trata la Pancreatitis Crónica?

Respuesta: El objetivo del tratamiento no es “curar” el páncreas, sino devolverle al paciente la calidad de vida. El manejo es un rompecabezas de alta especialidad y se basa en 3 pilares:

1. Quitar la Causa: ¡Suspender el alcohol por completo es innegociable!

2. Controlar el Dolor: Con un esquema de medicamentos especiales para dolor crónico (a veces es necesario que intervenga una clínica del dolor).

3. Reemplazar la Función (¡La parte clave!):

   • Enzimas Pancreáticas: Si tu páncreas ya no hace enzimas, ¡te las tienes que tomar! Damos una Terapia de Reemplazo Enzimático (TREP). Son cápsulas con enzimas que tomas con cada comida para poder digerir, absorber nutrientes, quitar la diarrea con grasa y subir de peso.

   • Control de la Diabetes: Manejar la insulina y el azúcar con un equipo multidisciplinario